Equivocarme es algo humano pero amarte es un pecado... Es un pecado.

Soy algo diferente, estoy loca, me confundo, me ilusiono, soy la más pesada, me río sola, desconfío, tengo dudas, caigo, me levanto, y caigo de nuevo, hago reír, odio sufrir, odio vivir, bipolar y hasta a veces un poco cruel. Soy un poco caprichosa, pocas veces suelo quedar satisfecha. Tengo problemas en expresar mis sentimientos. La gente al principio suele pensar que soy tímida, pero simplemente, necesito unas horas para tener un poco de confianza y después soy la mas goma. Soy demasiado impulsiva, hago cosas sin pensar, de las cuales no me arrepiento. Es muy Fácil hacerme daño, soy bastante sensible. Odio que me mientan. Soy exageradamente celosa. Nunca encuentro lo que busco, siempre pierdo todo, soy una desordenada, pero adoro el orden. Me río por cualquier cosa y es muy poco lo que pido para ser feliz. Me encanta soñar despierta, imaginar mi futuro y recordar los más lindos momentos. No tengo la mejor figura física, ni una sonrisa perfecta; me despeino con el viento y en mi casa nunca ando presentable. Me demoro mucho más de una hora en arreglarme; soy indecisa y pienso mucho que ropa ponerme, sea hasta para ir a comprar cerca de mi casa. Me molestan muchas cosas, lo se; no soy la primera opción de muchos, ni pretendo serlo. Yo dije miles de te quiero por sentir y muchos otros por cumplir; ya muchos me dijeron que me querían, y ahora apenas pueden decirme un hola. Ya me hicieron quedar como una tonta, pero no me importó y seguí igual. He hecho muchas cosas. Soy como soy y me gusta ser. Y aunque a veces diga palabras estúpidas sin pensar, otras tantas palabras hermosas, no me arrepiento de nada.
NO TENGO LO QUE QUIERO, PERO QUIERO LO QUE TENGO. Y ESO ES LA BASE DE LA FELICIDAD-♥

La ruleta rusa.

Como introducción les voy a contar un poco de un libro que una vez leí, donde se hablaba del amor desde la parte psíquica. Se explicaba un "proceso de enamoramiento" donde el autor, habla de 3 etapas. Una primera, en la que se ve a la otra persona como "perfecta" y uno es "ciego" de ver sus defectos. En la segunda es donde se empiezan a "ver" estos defectos y probablemente se genere un distanciamento.... Finalmente, nos encontramos en la última de las etapas. La aceptación, aceptamos las diferencias, el sentimiento se potencia. Y estamos enamorados.

El camino a encontrar el amor no es nada fácil... Pero yo nunca quise encontrarlo. Estuve en una relación, y sufrí mucho. Cuando logré empezar a superar el dolor decidí no volver a lo mismo, no encontrarme "dependiendo" de una persona, al menos, por un largo largo tiempo. Pero qué loca es la vida y qué increíble es la imposibilidad de controlar nuestros sentimientos.
Conozco a un chico. Sí, como todos en el mundo, ¿no? pero siento que este no es uno cualquiera.  Lo conozco hace 2 años. Hace 1 que ya no lo puedo mirar de la misma manera. Qué me pasó, no sé. 
Será su forma de hablar, su humor, su personalidad, su manera de tomarse las cosas tan relajadamente, sus pensamientos tan profundos (y esa mirada, ni hablar), sus abrazos reconfortantes, su sinceridad, sus reflexiones.... Todo. Fue a principio de este año, cuando me dí cuenta frente a qué tipo de persona estaba. El miedo me aterrorizaba, miedo al rechazo (bonus track: él tenía novia), miedo a sufrir, un sinfín de temores. Pero no podía lograrlo, ahí estaba él, con su sonrisa tan perfecta mirándome todas las mañanas, sus diarios "cómo estas?", y su mirada de la cual no me podía resistir. Y ahí siempre yo, en una lucha contra mis sentimientos, queriendo evitarlos a toda costa. Me negaba, me niego. No puedo. No quiero volver a sufrir.

Digamos que estuve bastantes meses en la primera etapa de ceguez, de la que hablaba al principio, hasta que en un momento dado me empecé a alejar y ver sus defectos, empezando por los fisicos hasta los de su personalidad....Me convencí de que él no era para mi. Pero no duré mucho.
Superé esa etapa para pasar a la otra con un sentimiento el triple de fuerte, aceptando sus defectos y amando sus virtudes. 
Y es acá donde me siento al borde de un abismo. Estoy enamorada. Y ya lo acepto. Y si lo acepto es porque ya no aguanto más. Él ya no esta de novio y eso me deja el pase libre. Peor. Me creo con chances. Ilusa. Pero no quiero, aunque puedo, se que no debería. Voy a sufrir. Voy a ser feliz. No sé. En mis pensamientos solo encuentro contradicción. No se que hacer. Ya caí en este abismo del que no puedo salir. Ya no sé que voy a hacer o qué me va a pasar. Ya todo depende solo del destino. Yo sé que el amor da mucha felicidad, pero llega un momento dónde la ilusión se apaga y el sufrimiento llega. Y no quiero que eso me vuelva a pasar. No.

Y este es el punto donde nuestra vida se convierte en una ruleta rusa. La bala está ahí. Pero no sabes cuando te va a disparar. (Seguis jugando, y te gusta)

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Dejame tu comentario